En los últimos años, la crisis hídrica ha sido uno de los mayores desafíos que enfrenta Chile, país afectado por una megasequía que ya lleva casi 15 años. En este contexto, la empresa argentina Kilimo, fundada hace una década, decidió cruzar la cordillera de los Andes para aportar su innovadora solución tecnológica en el uso eficiente del agua en la agricultura. Con presencia en varios países, incluyendo Argentina, Chile, y otros cinco en la región, Kilimo se ha consolidado como un referente en el ámbito de la “climatech” o tecnología climática, un campo que busca mitigar los efectos del cambio climático mediante la digitalización y tecnificación de sectores clave como la agricultura.
La misión de Kilimo: Transformar el uso del agua en la agricultura
La visión de Kilimo, según Andrea Ramos, su VP de Adaptación Climática, es clara: transformar el valor del agua en la producción de alimentos. Esto se debe a que la agricultura es uno de los sectores que más agua dulce consume a nivel mundial, y si se optimiza el uso de este recurso, es posible cambiar radicalmente la manera en que se producen los alimentos. “Si aprovechamos la oportunidad de digitalizar y tecnificar esta industria, podemos transformar el mundo”, comenta Ramos.
Un modelo de negocio innovador: Invertir en seguridad hídrica y premiar a los agricultores
Kilimo ha desarrollado un modelo de negocio que involucra tanto a grandes corporaciones como a pequeños agricultores. Las empresas que invierten en la seguridad hídrica en cuencas estresadas financian no solo la tecnología que la empresa provee, sino también un pago adicional a los agricultores que adoptan estas innovaciones. Este enfoque, conocido como “pago por servicio ecosistémico”, tiene como objetivo incentivar a los agricultores a cambiar sus prácticas agrícolas y adoptar tecnologías que les permitan optimizar el uso del agua. Según Ramos, Kilimo es la primera empresa en Latinoamérica que implementa este modelo en el sector agrícola.
Tres tipos de intervenciones para mejorar la eficiencia hídrica
Kilimo ha desarrollado tres intervenciones clave para mejorar la eficiencia en el uso del agua en la agricultura: la conversión de riego, el uso de inteligencia artificial (IA) y la agricultura regenerativa.
- Conversión de riego: En áreas donde el riego por inundación es la norma, Kilimo diseña e instala sistemas de riego tecnificado, como el riego por goteo, que es mucho más eficiente en términos de consumo de agua. Además, la empresa ofrece capacitación constante a los agricultores para que puedan utilizar correctamente los sistemas instalados.
- Inteligencia artificial: Kilimo utiliza IA para generar eficiencia hídrica mediante el análisis de datos meteorológicos y de cultivos. La compañía recopila datos de estaciones meteorológicas y usa satélites para crear un coeficiente específico para cada campo. Con esta información, los agricultores reciben recomendaciones precisas sobre cuánto regar, evitando el derroche de agua.
- Agricultura regenerativa: Kilimo también promueve prácticas agrícolas que contribuyen a la sostenibilidad del suelo, como la rotación de cultivos y la cobertura vegetal. Estas prácticas no solo mejoran la fertilidad del suelo, sino que también aumentan la capacidad del terreno para retener agua y nutrientes, lo que a su vez optimiza el uso del agua en el riego.
Focalización en las cuencas más estresadas de Chile
En Chile, Kilimo ha puesto el foco en tres cuencas prioritarias que sufren los efectos de la crisis hídrica: las cuencas del Maipo, del Aconcagua y del Maule. La cuenca del Maipo, que abastece de agua a la capital, Santiago, es una de las más estresadas del mundo, y la situación es aún más crítica debido a que depende del 40% del Producto Interno Bruto (PIB) del país. Además, las cuencas del Aconcagua y del Maule también enfrentan serias dificultades, con precipitaciones cada vez más escasas y una sequía estructural que dura más de diez años.
El impacto de Kilimo en la crisis hídrica
Kilimo está demostrando que la tecnología puede ser una herramienta fundamental para enfrentar la crisis hídrica. En el caso de la conversión de riego, Kilimo ha logrado mejorar la eficiencia hídrica en hasta un 70% en algunos proyectos. Mientras tanto, el uso de IA en la gestión del riego ha permitido aumentar la eficiencia en un 20-30%. Estos avances no solo contribuyen a la sostenibilidad de los cultivos, sino que también ofrecen una solución real a los agricultores que, en muchos casos, enfrentan la quiebra debido a la falta de agua.
Además, Kilimo se asegura de que sus intervenciones sean sostenibles a largo plazo. La empresa no solo entrega la tecnología, sino que también capacita a los agricultores y realiza un seguimiento constante para garantizar que los sistemas de riego funcionen correctamente y que se mantenga la eficiencia hídrica en el tiempo.
Reconocimiento a nivel internacional
Kilimo ha sido reconocida a nivel internacional por su trabajo innovador en el sector de la adaptación climática. En diciembre de 2024, la empresa fue incluida en el listado de LATAM Cleantech 25, un ranking que destaca a las empresas latinoamericanas más innovadoras en el ámbito de la sostenibilidad. Este reconocimiento es un reflejo del impacto positivo que Kilimo está teniendo en la agricultura chilena y en otros países de la región.
La crisis hídrica en Chile es un problema urgente que requiere soluciones innovadoras. Kilimo está demostrando que, a través de la tecnología, es posible optimizar el uso del agua en la agricultura y garantizar la sostenibilidad de los cultivos. Con un modelo de negocio que involucra tanto a grandes corporaciones como a pequeños agricultores, la empresa está abriendo el camino hacia un futuro más sostenible para la agricultura en Chile y en otros países de la región.